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Causas Directas de la Extinción – Colección

El mercado internacional de vida silvestre es altamente rentable y sucede a unos niveles que la mayoría de las personas no sospecha. Enormes cantidades de animales y plantas son recogidas y embarcadas por todo el mundo para la investigación científica y médica, y para ser exhbidas en parques zoológicos y jardines, para coleccionistas privados y para obtener productos derivados de ellos.

A veces se ofrecen animales exóticos a precios altos para lo que los vendedores llaman “propósitos científicos”. Sin embargo, los avestruces, gansos, marabúes, zorros y otros que a veces aparecen en las listas, tendrían muy poca utilidad en experimentos médicos.

Las colecciones para zoológicos y laboratorios han ayudado a reducir las poblaciones de gorilas casi hasta el punto de la extinción, especialmente cuando muchos son muertos en el proceso de la captura o mueren en cautiverio antes de ser exhibidos o realizados experimentos en ellos.

Algunos zoológicos también ponen presión sobre especies en peligro, ya que a veces compran animales de traficantes cuestionables. Con frecuencia, la forma en que estos animales son tratados y manejados es horrible. En Agosto de 1978, 3 tapires malayos, 3 leopardos, 50 macacos y muchos gibones de 3 especies, llegaron al aeropuerto de Bangkok, apretujados en 6 jaulas; estuvieron así durante varios días en un intenso calor antes de ser enviados a Bélgica. Por la forma en que estos animales son capturados, los científicos estiman que los cuarenta jóvenes gibones cautivos representaban la destrucción de por lo menos cien grupos reproductores.

No solamente se colectan para los zoológicos sino que para también para el negocio de las mascotas. En 1970, casi 84 millones de peces vivos fueron importados en Estados Unidos y para 1979 el número había subido a cerca de 250 millones. Entre 1967 y 1972, el Reino Unido importó 1.2 millones de especímenes de una especie de tortuga desde Marruecos; un número similar fue a parar a Europa continental. Se cree que el 80% muere en el primer año de cautividad. La mayoría de los animales salvajes no prosperan cuando están enjaulados, y numerosos mueren en el proceso de captura y transporte. Una de las aves más cotizada es el Gallito de la Roca y que es capturada en su hogar en los Andes del Norte. Se cree que, por cada una que llega a su destino, cincuenta mueren.

También las plantas son enviadas a otros países usando medios ileguales. Entre Octubre de 1977 y Septiembre de 1978, 7 millones de plantas de cactus fueron importadas en Estados Unidos desde más de cincuenta países. Estas plantas adornan las casas y jardines de los coleccionistas hasta que mueren, incapaces de reproducirse y mantener sus poblaciones y, con frecuencia, viviendo en lugares inapropiados. En 1978, toda una población completa de una especie de cactus (solamente se conocían dos poblaciones de esa especie), fue llevada a Alemania en quince maletas.

En 1979, los oficiales de aduana del aeropuerto de Frankfurt, Alemania, confiscaron 3,600 individuos de una de las especies más rara de cactus. En Texas (Estados Unidos), cerca del Parque Nacional Big Bend, alrededor de 25,000 a 50,000 cactus son recogidos cada mes, y muchos mueren antes de llegar al mercado.

Pero no solamente sucede con los cactus; también las orquídeas son recogidas para ser comercializadas. La última colonia de la Orquídea Fantasma, la más rara de las orquídeas británicas, produjo solamente cinco flores en 1974. Dos fueron robadas, y una tercera fue maltrecha por visitantes. En los Alpes, las vertientes verticales de la parte norte son escaladas por personas que van a recoger una planta Saxifragaceae rara. Y en las selvas de Sumatra, las flores más grandes del mundo, Rafflesia arnoldii, están amenazadas debido a que son un fuerte atractivo para los coleccionistas.

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