¿Qué es el monzón?
Para un desarrollo más extenso de este tema, vaya a esta página en Ciencias de la Tierra: “Los monzones“.
Un monzón se define como un cambio estacional en la dirección del viento. El término se deriva de la palabra árabe “mausim“, que significa “estación”. Originalmente el término era aplicado por marineros árabes para referirse a los vientos cambiantes estacionalmente en el Océano Índico y regiones circundantes, incluyendo el Mar de Arabia.
Estos vientos soplan desde el suroeste durante una mitad del año y del noreste durante la otra. Por lo tanto, hay cambios estacionales que se observan claramente como vientos del noreste que prevalecen durante el invierno en el subcontinente de la India y del suroeste en el verano (ver Figuras 1a y 1b). Otros monzones ocurren en Australia y África.
Figura 1. Vientos superficiales en el Hemisferio Norte
Debido a una mejor comprensión de los monzones, la definición ahora denota sistemas climáticos donde quiera que la humedad aumente dramáticamente en la estación cálida. El caso mejor conocido es el monzón asiático, que afecta al sureste de Asia y al subcontinente indio, pero también existe un clima monzónico en el norte de Australia, África Occidental y otras partes (ver Figura 2). La presencia Norte a Sur de los Andes impide la aparición de fenómenos similares tanto en América del Sur como del Norte.
Figura 2. Regiones monzónicas (encerradas con línea sólida)
El monzón es uno de los fenómenos climáticos más dramático en el planeta. Las grandes superficies envueltas en los monzones y la gran escala del clima dentro de ellos sugieren que los monzones juegan un papel significativo en la modulación del clima global. Cuando ocurren fuertes precipitaciones monzónicas en una región, en las regiones opuestas se presentan sequías.
Un cambio monzónico estacional se caracteriza por una diversidad de mecanismos físicos que producen fuertes vientos estacionales, un verano húmero y un invierno seco. Todos los monzones comparten tres mecanismos físicos básicos: diferencia en el calentamiento entre la tierra y los océanos, las fuerzas de Coriolis debido a la rotación de la Tierra, y el papel del agua que almacena y libera energía a medida que cambia de líquido a vapor y viceversa (calor latente). El efecto combinado de estos tres mecanismos es el que determina las inversiones monzónicas características de los fuertes vientos y la precipitación.
En el caso del Monzón del Océano Índico, el primer mecanismo y el tercero producen efectos más intensos que en cualquier otra parte del mundo. De interés particular es la fase “verano húmedo” de Junio a Septiembre con vientos prevalentes del suroeste y fuertes lluvias.
Para un desarrollo más extenso de este tema, vaya a esta página en Ciencias de la Tierra: “Los monzones“.